viernes, 18 de mayo de 2012

Congreso en Estrasburgo

La semana pasada (del 9 al 13 de abril) he estado en Estrasburgo en un congreso sobre los derechos humanos y su aplicación en los países miembros del Consejo de Europa. Esta institución, por cierto, no es parte de la Unión Europea sino que al contrario fue fundada anteriormente y consta de 47 países, todos los europeos salvo Bielorrusia.


La institución dependiente del Consejo más famosa es sin duda el Tribunal Europeo de los Derechos Humanos, y en él tuvimos la oportunidad de hablar con algunos jueces sobre puntos importantes que nos preocupan. A mí, desde luego, la vulneración del principio de igualdad que supone que en España esté vigente la Ley de Violencia de Género.

Y reconozco que mi sorpresa fue positiva al conocer que una comisión está trabajando en preparar un proyecto para luchar contra la violencia sobre las mujeres “que extenderá igualmente su protección a los hombres víctimas de violencia doméstica”. Son palabras literales del informe correspondiente.

A la espera de que salga ese informe creo que es momento más que oportuno para que España tome nota y no mantenga al margen de la protección a los hombres. Ya va siendo hora, ya han sido muchas las injusticias.

viernes, 30 de marzo de 2012

Novedades judiciales (1): el final de las vacaciones judiciales

Cambiando un poco de tercio voy a analizar en las próximas entradas las novedades que el nuevo ministro de justicia ha anunciado, se supone que con la voluntad de resolver los problemas que aquejan a nuestro sistema judicial y a su administración.
Voy a intentar hacer en la medida de lo posible cualquier valoración política del asunto, y mucho menos otras de sentido psicológico. Quiero decir, que ni voy a entrar en la posible utilidad política que le pretenda sacar el PP ni mucho menos en el sentido con que lo haga el ministro Gallardón de obtener protagonismo y demás. Esos asuntos, muy interesantes, los dejo para otros o para otra ocasión.
La primera novedad es que se pretende que todos los meses sean judicialmente hábiles. Hasta ahora el mes de agosto los juzgados permanecen abiertos, pero solo los que tramitan asuntos penales pueden exigir al abogado la presentación de escritos, la asistencia a declaraciones, etc. En la jurisdicción civil, por ejemplo, el día siguiente al 31 de julio es el 1 de septiembre.
Los abogados españoles y aquellos estamentos que los representan han respondido contra el anuncio de la medida basándose fundamentalmente en cuestiones gremiales: esa medida supone que ningún abogado que trabaja en despachos pequeños pueda cogerse vacaciones en ningún momento del año. Pero desde un punto de vista general este sería el menor de los problemas. La cuestión que hay que plantearse es si verdaderamente esto puede servir para agilizar la administración de justicia; creo que no.
Dado que todos los ciudadanos tenemos un mes de vacaciones, incluidos los que tenemos que ver algo con la justicia, lo que sí parece razonable es que ese mes de vacaciones fuera siempre en el mismo momento. Ahora los jueces se van cuando quieren y los funcionarios también, teniendo de facto algunos dos meses de vacaciones (la que están fuera y el mes de agosto que “trabajan”). Esa sería la mejor manera de evitar vacaciones duplicadas.
Por cierto, que las vacaciones judiciales no son un invento puramente español como en algún sitio he oído. Ni mucho menos. A simple título de ejemplo he aquí la situación de otros países: dos meses en el Líbano (de 15 de julio a 15 de septiembre), un mes en Marruecos (el de agosto), dos en Benín (de 15 de agosto a 15 de octubre), uno en Hungría (de 15 de julio a 20 de agosto), dos en Argelia (de 15 de julio a 15 de septiembre), dos en Túnez (de 15 de julio a 15 de septiembre), dos en Bélgica (de 1 de julio a 1 de septiembre), uno en Argentina (el de enero), dos y medio en Grecia (de 1 de julio a 15 de septiembre), uno en Australia (de 21 de diciembre a 31 de enero), uno en Perú (el de febrero), uno y medio en Italia (de 1 de agosto a 15 de septiembre). De los países que he encontrado solo la República Checa y Armenia no tienen un mes de inactividad, y en Japón cada juzgado tiene tres semanas que se cogen en momentos diferentes durante los meses de verano para evitar la inactividad; algo quizá muy parecido a la idea que pueda plantear nuestro Gallardón.

martes, 3 de enero de 2012

El primer asesinato doméstico del PP

El primer asesinato doméstico padecido por una mujer ha provocado un revuelo político por culpa de una nota de prensa del nuevo ministerio dirigido por Mato. Resulta que la nota de repulsa habla de “violencia doméstica” y no “violencia de género”, y las feministas han saltado, exministra Leire incluida.
Y Mato se vio obligada a hablar de algo que claramente no conocía, y dijo una cosa y la contraria pero sin darse cuenta. O eso parecía. Dijo que el nombre es lo de menos y que lo importante es proteger a las mujeres, para luego añadir que también es importante proteger a cualquier persona. Y claro, para el feminismo proteger a todos es independientemente de su sexo es intolerable porque aquí a quien hay que proteger es solo y exclusivamente a las mujeres. Así que vuelta a saltar contra la ministra.
No es una cuestión de nombres, como intentaba decir la ministra para quitarle importancia al asunto. Es una cuestión de conceptos. Y el concepto de “violencia de género” es un invento que debería desaparecer de las normas españolas. Pero no creo que el PP vaya a meterse en este asunto, que exigiría explicarlo mucho y muy bien. Y claro, antes entenderlo. Y si algo quedó claro ayer es que la nueva ministra no sabe de qué va la vaina.
Ojalá que quiera enterarse.

Lo que se puede esperar del gobierno del PP

La esperanza es casi siempre irracional, y en consecuencia del nuevo gobierno del PP podemos esperar grandes cosas: el fin de la crisis económica, el pleno empleo y hasta conquistar Francia e izar la gloriosa bandera española en lo alto de la torre Eiffel. Ahora bien, ¿qué expectativas lógicas cabe tener del nuevo gobierno? En concreto hablamos de la lucha contra la violencia doméstica y la desigualdad de género institucionalizada por el PSOE.
Llevo varios años recordando que si bien la propuesta de la Ley de Violencia de Género fue del PSOE también fue votada por el PP, y que salvo la irracional esperanza, no había ninguna razón para pensar que un hipotético gobierno popular fuera a arreglar el desaguisado jurídico y social de la dichosa ley.
Ahora el gobierno no es hipotético y aunque lleva dos o tres días nada más al mando y no les ha dado tiempo a hacer nada de nada sí que han tenido el suficiente para que la nueva ministra de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad haya dicho que uno de sus objetivos es luchar contra la “violencia sobre las mujeres”. Lo dijo en su intervención tras la entrega de la correspondiente cartera ministerial recogida de la insigne jurista Leire Pajín.
Ya era suficiente para entender que el PP se traga completamente la ideología feminista de género al ver que en el nombre del ministerio está lo de la igualdad, pero de verdad que oír a la nueva ministra resulta al menos tan indignante como oír a su predecesora. La nueva, célebre por no darse cuenta de que tenía un jaguar en su garaje, tiene claro que es necesario atacar a los hombres por el hecho de serlo, y que irá más lejos que sus ínclitas predecesoras, Aído y Pajín. Por cierto, que no deja de resultar curioso que sea una tal Mato la que se dedique a luchar contra la violencia.
Y sobre todo, qué siniestro que el PP vaya a mantenernos por la misma línea anticonstitucional y absolutamente canalla, “profundizando en la defensa de las mujeres”. O dicho de otra forma, que las únicas expectativas que podemos tener en este asunto es precisamente que la ley se endurezca y provoque aún más desigualdad entre hombres y mujeres. Probablemente para tapar con esta demagogia algunos de los “recortes” a los que se disponen Mato (homenaje en el gobierno a Belén Esteban) y sus correligionarios.